El domingo 27 de noviembre, en la catedral de Nápoles, 17 discapacitados recibieron del cardenal Crescenzio Sepe los sacramentos de la confirmación y de la primera comunión.
Se habían preparado durante el año participando con fidelidad y entusiasmo en la catequesis.
La alegría de los discapacitados del movimiento de los Amici, de la Fondazione Istituto Antoniano y del centro de día Dinastar, hizo que la liturgia fuera especialmente hermosa y festiva.

El cardenal Sepe manifestó su alegría personal por el encuentro con los discapacitados en su apasionada homilía: “…la Iglesia os acoge con gran honor y os abraza como el Señor abrazó a muchos de sus amigos… a ellos les dio aquella gracia que les colmó de felicidad porque les hacía hijos de Dios… vosotros sois los amigos… predilectos de Jesús, que tiene un amor particular porque solo se refleja en los amigos más verdaderos y más sinceros”.

“En el rostro de los que reciben la confirmación –prosiguió- está el rostro sonriente del amor de Dios que se encarna”.
Tras la liturgia, en la basílica de Santa Restituta, el cardenal saludó a todos, dejó un regalo de recuerdo de aquel día y se citó con todos para la Navidad.