La Comunidad de Sant'Egidio vive el trabajo ecuménico como amistad, oración y búsqueda de la unidad entre los cristianos del mundo entero.

Desde la Jornada Mundial de Oración de Asís que convocó S.S. Juan Pablo II en 1986, la Comunidad respondió a la invitación final que el Papa hizo en aquel histórico encuentro: “Continuemos difundiendo el mensaje de la paz y viviendo el espíritu de Asís”.

Desde entonces, a través de una red de amistad entre representantes de distintos los credos y culturas de más de 60 países, la Comunidad ha continuado promoviendo un peregrinaje de paz que ha recalado, año tras año, en varias ciudades europeas y mediterráneas.

Tras dos encuentros en Roma (1987 y 1988), vino el de Varsovia titulado “War never again”, en septiembre de 1989, en ocasión del cincuenta aniversario del inicio de la Segunda Guerra Mundial. Luego llegaron los encuentros de Bari, Malta y, en 1992, el de Bruselas, “Europa, religiones y paz”, sobre el tema de la unidad europea y de su relación con el sur del mundo. En 1993 el peregrinaje hizo escala en Milán y, en los años posteriores, en Asís y Florencia. Una reunión particular fue la de 1995 en Jerusalén, en el corazón de la Ciudad Santa, bajo el tema "Juntos en Jerusalén: judíos, cristianos y musulmanes".

Tras los encuentros de Roma y de Padua-Venecia, en 1998 se celebró el excepcional encuentro de Bucarest “La paz es el nombre de Dios: Dios, el hombre y los pueblos", que por primera vez la Comunidad organizaba junto a la Iglesia ortodoxa de Rumanía. Escribía el papa Juan Pablo II en la "Novo Millennio Ineunte": tenemos "también el gran desafío del diálogo interreligioso, en el cual estaremos todavía comprometidos durante el nuevo siglo (...). El diálogo debe continuar".

En Nápoles, en 2007 el papa Benedicto XVI afirmó: “Respetando las diferencias de las distintas religiones, todos somos llamados a trabajar por la paz y a un compromiso eficaz para promover la reconciliación entre los pueblos. Este es el auténtico «espíritu de Asís», que se opone a toda forma de violencia y al abuso de la religión como pretexto para la violencia. (...) La Iglesia católica pretende continuar recorriendo el camino del diálogo para favorecer el entendimiento entre las distintas culturas, tradiciones y sabidurías religiosas.

En 2008 el encuentro se celebró en la isla de Chipre, bajo el título "La civilización de la paz".

En 2009, setenta años después del inicio de la Segunda Guerra Mundial, la peregrinación de paz llega a Cracovia, la ciudad de Juan Pablo II, en Polonia. El Encuentro, titulado "El espíritu de Asís en Cracovia", se celebra del 6 al 8 de septiembre de 2009.

En 2010 el "espíritu de Asís" vuelve a España, a Barcelona. En un tiempo difícil, de crisis económica y de conflictos regionales que provocan incertidumbre, miedo y desarraigo, las religiones se interrogan para encontrar en el diálogo las energías espirituales que pueden ofrecer a un mundo sin visiones y, por tanto, sin futuro. El encuentro contará con la presencia de numerosos cardenales y de personalidades ecuménicas significativas provenientes desde el Patriarcado de Moscú hasta el Consejo Ecuménico de las Iglesias, así como de destacados dirigentes de la Federación Luterana Mundial y del Consejo Metodista Mundial. Será importante la presencia de judíos y musulmanes (de 16 países) y de miembros de las grandes religiones mundiales.

En 2011 el espíritu de Asís fue a la ciudad europea de Múnich (Alemania). El título del encuentro "Convivir, nuestro destino", nos recordó el vínculo entre las religiones y entre los pueblos ante los desafíos de la paz y de la convivencia. En 2012 fue en Sarajevo, y luego, una vez más, en Roma (2013), en Amberes (2014), en Tirana (Albania) (2015), en Asís (2016), y el año pasado en Münster - Osnabrück (2017).