El obispo auxiliar de Barcelona, ​​Sebastià Taltavull, presidió el miércoles la celebración de la comunidad de San Egidio en recuerdo de todos aquellos que en estos últimos años ofrecieron su vida por el Evangelio. A las puertas de la Semana Santa, la basílica de los Santos Mártires Justo y Pastor vivió una emocionante vigilia de oración dedicada a la memoria de los cristianos del siglo XX, por su testimonio y víctimas de la violencia.

"Esta oración es una oportunidad para vivir como un solo corazón de tantos cristianos que en los últimos tiempos han dado su vida por el Evangelio en todos los continentes. Estamos viviendo tiempos difíciles, donde hay cristianos que de manera pobre y humilde resisten pacíficamente. Nosotros como cristianos que viven el don de la paz queremos unirnos en una sola alma con ellos orando fraternalmente", comentó el responsable de la Comunidad de San Egidio, Jaume Castro.

En la oración se recordó los testimonios de fe de los cuatro continentes. Fueron recordados todos por su nombre, acompañados por el canto del por Kyrie Eleison y encienden una vela, una luz que recordó que están en comunión con el Señor y que conectó a todos los presentes con su presencia.

Homilía del obispo Taltavull

El acto contó con la presencia del rector de la parroquia, el Dr. Armand Puig, y otras personalidades que representaron las diferentes iglesias cristianas. Durante la homilía, el obispo Taltavull quiso ponerse al lado de todos los que sufren y defienden la causa a pesar de las situaciones adversas

"Hoy en esta oración, en la que ha resonado la palabra de Dios como palabra que se identifica con los que sufren y nos pide tomar partido en su favor, queremos compartir el dolor de los que claman desde la persecución y el martirio. Son hermanos y hermanas nuestros. Hoy queremos recordar a todos y tenerlos muy presentes en la oración ", remarcó.

Además, el obispo auxilar animó a todos los feligreses a seguir el ejemplo de compromiso de todos los homenajeados durante la vigilia vespertina. "Los mártires de los siglos XX y XXI son los que hoy hacemos presente, ellos que son el testimonio de la fe de nuestro pueblo. Hacemos nuestras las convicciones expresadas por Jesús en el Evangelio y pedimos la fortaleza para responder, también como los mártires, a todos los embates de quienes creen que, asesinando y matando, dan culto y gloria a Dios ".

Por otra parte, el auxiliar de Barcelona recordó uno por uno a todos los mártires recordando que eran gente normal, con familia, hijos, amigos, y tuvo unas palabras especiales dedicadas al obispo salvadoreño Mons. Romero, reconocido mártir recientemente. "Era un pastor cercano, testimonio de paz, amigo de los pobres, asesinado en El Salvador mientras celebraba la Eucaristía. El encuentro con Jesús había sido siempre y ahora no se deja esperar. Como él, tantos y tantos mártires que ahora los haremos presentes en nuestra asamblea de oración. Hay que identificarlos y aprender de su firmeza en este momento de prueba para todos los que creemos en Jesús".