Barcelona: Liturgia en memoria de los amigos sin hogar que han muerto por la dureza de la vida en la calle

20 febrero 2011 - Basílica dels Sants Màrtirs Just i Pastor

El domingo 20 de febrero, la antigua Basílica dedicada a los Santos Mártires Justo y Pastor, en Barcelona, se hizo pequeña cuando a las 12:00 empezó a llenarse de tantos amigos y personas sin techo que se reunieron para celebrar la Liturgia y recordar a todos aquellos que han perdido sus vidas después de haber vivido la dureza de la calle.
Cada año, empezando con Modesta y continuando con Rafael Díaz y Antonio Varela, que en diciembre de 1996 murieron a causa del frío en plena Avenida Diagonal de Barcelona, se recuerdan uno a uno sus nombres, como si de una letanía se tratara, y con ellos se encienden las luces de muchas velas. La fidelidad,  la amistad y el encuentro con muchas personas que viven en la calle han tejido bonitas relaciones que han sostenido sus vidas hasta el final de sus días. Al final, la fragilidad de una flor y la imagen del icono de San Lázaro, el leproso, fueron el bonito recuerdo de esta memoria. Terminada la Liturgia se hizo un paseo y una entrañable comida juntos en la nueva casa que la comunidad tiene en medio del barrio del Raval, al lado de la iglesia románica de San Lázaro, que visitaron.