A las 12 el papa Francisco entró en el Sacro Convento donde comió con los jefes religiosos y las personalidades que participan en el encuentro "Sed de paz". Entre ellos había también 12 refugiados provenientes de países en guerra, y que actualmente están acogidos por la Comunidad de Sant’Egidio.
Entre ellos está Rasha, con su hija Janin de 7 años, que llegaron a Italia en febrero con los corredores humanitarios de Sant'Egidio, la Federación de las Iglesias Evangélicas y la Mesa Valdesa. Su familia es originaria de Palestina y vivían en un campo de refugiados de la periferia de Damasco, antes de huir al Líbano. También llegaron con los corredores humanitarios cinco cristianos sirios: son los católicos asirios Fadi y Ruba, que con su hijo de once años Murkus huyeron de Hasake; de confesión armenia son Osep, Kevork y Tamar, que más tarde intervino en el palco de la ceremonia de conclusión, dando testimonio del sufrimiento de su ciudad, Alepo.
Provenientes de la región ensangrentada por Boko Haram estaban las nigerianas Paulina y Evelyn; huyó de Eritrea Enes, mientras que es de Mali Alou, de veintitrés años, que sobrevivió a un terrible viaje en una barca desde Libia hasta Sicilia. |