La lucha contra la malnutrición de los niños más vulnerables es un compromiso de Sant'Egidio en varias latitudes. Por eso los días pasados partieron hace unos días del puerto de Génova, tras una larga preparación y la participación de varias instituciones (Guardia de Finanzas, Agencias aduaneras, Ministerio de Exteriores) doce contenedores con unos 500.000 kg de pasta de alta calidad donada a la Comunidad.

Destinatarios: los niños de El Salvador, Perú y Libia.

En El Salvador la pasta será distribuida en las escuelas rurales del país con el proyecto "Alimentarse bien para estudiar mejor". La malnutrición de los niños representa un problema no solo para su salud, sino también para su capacidad de aprendizaje. Muchas veces el cansancio por los largos caminos que deben hacer a pie y la malnutrición hacen que estos niños no puedan seguir sus estudios de manera regular. 

La escuela debería ofrecer una comida al día pero la crisis económica que afecta desde hace tiempo a El Salvador ha reducido esa ayuda a un vaso de leche por alumno.
 Los Jóvenes por la Paz ayudarán a realizar la distribución.

En Perú la pasta se utilizará para ayudar a los comedores sociales que hay en algunas escuelas de primaria gestionadas por congregaciones religiosas, tras las inundaciones que afectaron gravemente al país  en los meses de marzo y abril. Los efectos negativos de las inundaciones que ha provocado más de 100 muertos y unos 18.000 desplazados son por desgracia aún evidentes en muchas zonas rurales y los niños de las familias más frágiles seguirán, gracias a esta ayuda, recibiendo una comida los días de estudio.

En Libia la pasta se destinará a los hospitales de Sebha y de Gat, dos importantes ciudades del Fezzan, adonde ya se enviaron dos contenedores de medicamentos. Continuamos aplicando así el acuerdo firmado en Sant'Egidio en 2016 por las principales tribus del sur para la libre circulación de la ayuda humanitaria. Con la entrega de alimentos y medicamentos la Comunidad de Sant'Egidio quiere ayudar al funcionamiento de los principales centros sanitarios del sur de Libia y responder a las exigencias de la población civil más frágil que sufre por la inestabilidad del país.