Durante los episodios de emergencia de refugiados de los últimos meses, los jóvenes por la paz de Catania fueron un recurso importante para toda la ciudad y para Sicilia.

Andrea Riccardi se reunió con ellos el 27 de febrero en la iglesia de Santa Clara, sede de la Comunidad de Sant'Egidio en Catania. El encuentro contó con la participación de doscientos jóvenes provenientes de varias ciudades de Sicilia y, entre ellos, un grupo de jóvenes de la Comunidad del centro de acogida C.A.R.A. de Mineo.

Al día siguiente Andrea Riccardi recogió el premio "Elefantino d'argento" de manos del alcalde de Catania, Enzo Bianco, que pronunció palabras de aprecio y afecto por la Comunidad de Sant’Egidio:

“Otorgar el 'Elefantino d'argento' a la Comunidad de Sant’Egidio representa un simbólico reconocimiento por lo que la Comunidad hace en Italia y en el mundo, donde es portadora de paz y de diálogo interétnico e interreligioso, pero también y sobre todo por lo que ha hecho y hace en Catania, en momentos de emergencia, como el desembarco de inmigrantes, cuando hace falta ayudar a las personas que sufren: tanto si son italianos como si no lo son, siempre hay una puerta abierta, una comida, una palabra de aliento".

Al recibir el premio, Andrea Riccardi manifestó su deseo de que Catania tuviera una "colocación no solo en Sicilia, no solo en Italia, sino en el centro del Mediterráneo", y añadió que buscar esa colocación "es algo que toca lo más profundo de la Comunidad de Sant'Egidio, que hoy es, con orgullo, más catanesa que ayer”.

Por la tarde se hizo la presentación del último libro del profesor Riccardi, "La sorpresa del papa Francisco". En el Teatro Sangiorgi de Catania un animado diálogo entre el autor y monseñor Antonio Raspanti, obispo de Acireale, cautivó la atención de una platea de unas trescientas personas.