El domingo 9 de marzo, en Ciudad de México, tuvo lugar un encuentro de Andrea Riccardi con las Comunidades de Sant'Egidio de diferentes zonas de Ciudad de México y de Puebla.
En su discurso, Andrea Riccardi recordó que todos somos discípulos y que la primera discípula fue María: "Ella nos recuerda que la Iglesia es de los pobres y de los humildes, y revela que ser cristiano significa ser madre".
Muchos respondieron a esta invitación, dando testimonio de la necesidad de una mirada materna en la vida de las grandes ciudades del país, por los niños y los jóvenes de la calle, para los niños y los jóvenes de la calle, para los ancianos y para muchos jóvenes que buscan orientación.
|